¿Alguna vez te has encontrado con la palabra “auditoría ambiental” y has pensado por qué una empresa necesitaría hacer eso? Bueno, es una evaluación sistemática y exhaustiva de la responsabilidad de una organización con respecto a la gestión ambiental. Y no hay uno, sino muchos motivos para realizarlo.
Pero, ¿resulta beneficioso? A continuación, te presentaremos la importancia de efectuar una auditoría ambiental de acuerdo a la Norma ISO 14001:2015, de qué se trata y señalaremos sus beneficios reales para tu organización.
¿Qué es una auditoría medioambiental?
Una auditoría medioambiental es una herramienta utilizada para el seguimiento, medición , análisis y evaluación de los efectos de determinadas actividades sobre el medio ambiente. Y según el tipo de auditoría y el enfoque de la investigación, existen distintos tipos de auditorías medioambientales.
En la actualidad, las organizaciones reconocen la importancia de las cuestiones medioambientales y aceptan que su actuación medioambiental sea examinada por un amplio abanico de partes interesadas.
Como tal, la auditoría medioambiental se utiliza para proporcionar información sobre el cumplimiento de la normativa medioambiental por parte de una organización, así como sobre su impacto general en el medio ambiente.
Y una vez efectuada y completada una revisión exhaustiva, los auditores o el auditor podrán ayudarte a identificar las mejores prácticas de gestión, aplicar medidas correctoras, racionalizar los procedimientos operativos estándar y determinar programas o planes medioambientales.
Importancia de las auditorías ambientales y sus tipos
¿Sabías que una auditoría ambiental es una forma efectiva de descubrir los impactos y riesgos de tu empresa en el medio ambiente? De hecho, el propósito principal de realizar auditorías es asegurarse de que el Sistema de Gestión Ambiental (SGA) de tu empresa sea proactivo y competente para abordar sus desafíos y objetivos ambientales específicos.
Asimismo, debes entender que el SGA de la organización no es solo un trámite, sino que evalúa y mejora periódicamente para garantizar el cumplimiento de los objetivos y metas ambientales. Por otro lado, existen tres tipos principales, dependiendo de la relevancia que tengan en tu empresa, a continuación, veremos cuáles son:
1. Auditoría de gestión medioambiental
En esta auditoría, es necesario evaluar meticulosamente el SGA para garantizar que funciona de forma competente y te pueda ayudar a progresar de manera continua hacia los objetivos. Asimismo, la auditoría del SGA es también un requisito obligatorio de la norma ISO 14001 que demuestra el compromiso con la gestión medioambiental.
De este modo, los objetivos clave de la auditoría del SGA son:
- Funcionamiento eficaz.
- El SGA apunta a los objetivos y metas predefinidos.
- Descubrir nuevas oportunidades para mejorar el desempeño ambiental.
- Confirmar que satisface las necesidades de la organización y de las partes interesadas.
2. Auditoría funcional medioambiental
Esta auditoría consiste en evaluar un aspecto concreto del SGA y comprobar que funciona según lo previsto. Por ejemplo, si tu SGA pretende reducir el uso de fuentes de energía en todos los procesos, tu auditoría consistiría en evaluar el consumo de energía, de acuerdo con el plan de reducción energética.
Asimismo, es importante recalcar que la auditoría funcional es útil cuando se necesita una actuación rápida en un determinado aspecto de la gestión medioambiental y para ello una auditoría completa puede requerir demasiado tiempo.
3. Auditoría de cumplimiento medioambiental
Esta auditoría es necesaria para garantizar la conformidad del SGA de tu empresa con los reglamentos legislativos o una norma. Por ende, la auditoría de conformidad identificará las deficiencias de tu SGA con respecto a una serie de requisitos y objetivos.
Y dado que la auditoría determinará el estado de cumplimiento de tu empresa con las obligaciones reglamentarias, requiere la intervención directa de la alta dirección. En consecuencia, es recomendable elaborar un plan de medidas correctoras para resolverlos y hacer que el SGA sea conforme.
Beneficios de la auditoría medioambiental
A continuación, conoce cuáles son los beneficios asegurados de realizar auditorías medioambientales periódicamente y por qué son esenciales para tu empresa:
1. Mejora de la reputación de tu empresa
Sin duda, estas auditorías contribuyen a mejorar el desempeño medioambiental, lo que refuerza la reputación de tu empresa en el sector. Asimismo, cuando los clientes, inversores, proveedores, socios, etc. saben que realizas auditorías a intervalos frecuentes, reconocen tus esfuerzos y tienen una impresión positiva de tu empresa.
2. Garantiza el cumplimiento de normativas más estrictas
Los gobiernos o las autoridades reguladoras están elaborando nuevas normativas medioambientales cada vez más estrictas debido a la creciente concienciación medioambiental. Por ende, el incumplimiento de cualquiera de las regulaciones no solo se considerará una violación, sino que la empresa podría ser sancionada.
3. Supone un ahorro
Por último, la auditoría medioambiental puede suponer un importante ahorro de costes dentro de una organización, ya que identifica los problemas de responsabilidad que pueden abordarse antes de que se produzca un accidente o se presente una reclamación.
Y el proceso de hacer que una empresa cumpla la normativa reduce los costes potenciales del incumplimiento. Por tanto, se pueden desarrollar cambios en el funcionamiento del proceso que eviten por completo la producción de emisiones, reduciendo así la necesidad de costosos equipos de control de la contaminación.
Hasta aquí, hemos visto la importancia de las auditorías ambientales y sus grandes beneficios en las empresas. Esperamos que este artículo te haya brindado toda la información necesaria y optes por mejorar el rendimiento de tu empresa en cuanto a la sostenibilidad.
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